Macarena Sáenz
Título: Diseño, color y bienestar
Por: Maite Agurto
Conocer el trabajo de Macarena Sáenz, diseñadora de interiores con especialización en neuroarquitectura, ha sido inspirador. Con su versatilidad y talento, Sáenz ha demostrado que el diseño puede transformar la vida de las personas, convirtiéndose en una herramienta poderosa para promover la salud física, social y emocional. Con una trayectoria que abarca desde la ciencia hasta las artes, su trabajo es un puente entre dos mundos aparentemente distintos, pero profundamente conectados.
Cofundadora y miembro de MI Comunidad de Mujeres Inmobiliarias, columnista, diseñadora de interiores y jurado en los Premios Chile Diseño 2024, Sáenz creció en un entorno que combinaba la sensibilidad artística de su madre y el rigor científico de su padre. Desde temprana edad, los colores, las formas y las atmósferas de los espacios despertaron en ella una curiosidad insaciable. «Siempre tuve una gran sensibilidad por los colores, las formas y las atmósferas creadas en los espacios. Con el tiempo, me di cuenta de que esa curiosidad y sensibilidad era un don y lo complementaba con una forma analítica de observar el mundo», recuerda.
Fue su madre quien le mostró cómo los colores influyen en el estado de ánimo y la percepción, una lección que moldeó su perspectiva sobre cómo estos son un pilar fundamental en la relación entre espacio y emociones. Inicialmente, Sáenz eligió un camino diferente: la odontología. Durante varios años, creyó que esta rama de la medicina le permitiría mejorar la salud de las personas de manera directa. Sin embargo, su pasión por el color y el diseño la llevó a replantearse su futuro profesional.
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