Autenticidad frente al mar
En la costa de Matanzas, en la Región de O’Higgins, surge Taka Hotel, fundado por Roberto Carrasco y Vanessa Amon. Lo que nació como un autoencargo mientras él estudiaba arquitectura y ella periodismo, hoy es un proyecto reconocido a nivel internacional: American Express lo destacó entre los once mejores nuevos hoteles boutique del mundo, además de consolidarse como Empresa B, con la convicción de que «buscamos no ser la mejor empresa del mundo, sino ser la mejor empresa para el mundo».
Así, lo que comenzó como un gran anhelo, hoy es una realidad. «El proyecto nació como un sueño de dejar la velocidad de la ciudad y volver a poner los pies en la tierra. Este se convirtió en un objetivo de vida, con el fundamento firme de desconectarse de acciones que hoy están normalizadas en la sociedad», explica Roberto. En ese camino, el apoyo de sus familias y la visión arquitectónica de Benny Dvorquez fueron determinantes para dar forma a lo que hoy es Taka.
En Taka, la luz, el viento y las texturas naturales se combinan para generar una atmósfera serena, demostrando que con pequeños detalles y materiales nobles se pueden crear espacios que trascienden. «Buscamos aprovechar la iluminación y el calor del sol del norte para contrarrestar el frío viento del sur. Con el uso de las texturas que nos entrega la naturaleza, potenciadas por la luz y el viento, se busca una armonía que genere paz. A través de simples decisiones con objetos naturales se puede hacer algo excepcional». Continúa leyendo en nuestra versión digital…
@takamatanzas
—Por Doris Cancino. Fotografía Gentileza Taka Hotel.
